Un millón trescientos mil feligreses recibieron al Papa en la capital, los asistentes coincidieron en que valió la pena. La mayoría paso muchas horas preparándose a la espera del gran momento.
Para nuestro pueblo colombiano es una esperanza de unión y paz. Del sueño que tenemos todos de algún día tener un país sin tanta corrupción, delincuencia, grupos armados y demás por colocarles un titulo «epidemias» que afectan nuestra amada, fértil, prospera y hermosa tierra. Ojalá cambie el corazón de las personas que solo buscan
Aun quedan días de esta visita tan especial Ojalá nos sirva de reflexión para ser cada día mejores.
Janet Ferreira
Imagen: blogcatolicogotitasespirituales.blogspot.com