Las autoridades de tránsito de Beijing han dado luz verde a las pruebas con autos sin chofer en un esfuerzo por impulsar el uso de inteligencia artificial (IA) para la movilidad.
El auto debe aprobar una valoración técnica en un sitio de entrenamiento antes de que se le permita salir a las calles. Habrá caminos y horarios designados para las pruebas. Se requiere de un conductor y el conductor será responsable si algún accidente ocurre, señaló la comisión.
La norma llega después que el jefe de Baidu, Robin Li, probó un vehículo autónomo de la compañía por las calles de Beijing, lo que causó controversia porque no había reglas respecto a esa prueba.
Los vehículos autónomos han estado atrayendo inversiones. De acuerdo con un informe del Instituto de Investigación Tencent, el financiamiento para los autos asistidos o sin chofer en China ha llegado a 10.700 millones de yuanes (1.600 millones de dólares). La movilidad ocupa el tercer sitio entre las industrias relacionadas con la IA luego del análisis de visión-imágenes y el procesamiento de voz.
La comisión dijo que la ciudad de Beijing ofrecerá un mayor apoyo al desarrollo y comercialización de vehículos autónomos.
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