Inflamación e irritabilidad de los bronquios, aumento en la producción de moco, dolor torácico, tos y dificultad para respirar son unos de los síntomas que produce el asma cuando la enfermedad no está controlada; las vías aéreas de los pulmones se inflaman, sus músculos se estrechan y se obstruyen, por lo cual el aire no puede fluir y la respiración se vuelve dificultosa.
Estas molestias pueden empeorar por diversos factores como los cambios bruscos de temperatura, las infecciones virales, el ejercicio, los conflictos emocionales, la exposición a humos (cigarrillo), al polvo casero, entre otros.
“Una mayoría de los cuadros asmáticos tienen origen genético y en otras ocasiones lo que se hereda es el fenómeno alérgico, estos se manifiestan como cuadros de rinitis, dermatitis, conjuntivitis, entre otros”, aseguró María del Socorro Medina Palomino, médica neumóloga pediatra adscrita a Colsanitas.
En la actualidad no existen medicamentos que curen el asma, pero hay terapias y cuidados para prevenir y controlar las crisis, permitiendo, a quienes la padecen, llevar una vida normal. Por esta razón, tenga en cuenta las siguientes recomendaciones:
1. Manténgase alejado de los alérgenos. El polen, el polvo, los ácaros, el pelo de los animales y los ambientes contaminados ya que estimulan las reacciones alérgicas.
2. No permanezca cerca de personas que fumen. El humo del cigarrillo provoca irritación en los pulmones y dificulta el flujo respiratorio.
3. Evite los cambios bruscos climáticos. Los ambientes húmedos, de invierno y cambios bruscos de temperatura son los principales causantes de la congestión de las vías respiratoria que al cerrarse le provoca al paciente un espasmo bronquial.
4. Cumplir los controles médicos, aun cuando no se tengan molestias o síntomas. El asma con frecuencia se confunde con otras afecciones respiratorias como las provocadas por la gripa. Por esta razón, es muy importante cumplir con los controles médicos y monitorear que todo se encuentre bien.
5. No automedicarse para controlar el insomnio. Por cuenta propia, no consuma medicamentos, ya que pueden tener efectos adversos. Los especialistas son los encargados de orientar al paciente, pues dependiendo del estado de la enfermedad, se recomendará el tratamiento más adecuado que ayudará a desinflamar y descongestionar los bronquios y aliviar las molestias propias de la enfermedad como son las asfixias.
Cortesía: Leonardo García