El exceso de glucosa puede provocar una acelerada producción de proteínas beta-amiloides que se agrupan en el cerebro, aumentando el riesgo de desarrollar demencia o Alzheimer
En el caso de la diabetes tipo 2, el tratamiento médico oportuno y continuo a lo largo del tiempo es uno de los factores clave para evitar la afectación apresurada de otros órganos.
No obstante, en la fase de prediabetes donde los niveles de azúcar en la sangre son más altos de lo normal, pero inferiores para alcanzar la diabetes, existe la posibilidad de contener el avance de esta enfermedad y evitar que se pueda convertir en diabetes tipo 2.
“Para impedir el avance de la Prediabetes a una diabetes estadio tipo 2, es imprescindible identificar a tiempo los signos de alerta como: aumento de la sed, fatiga, visión borrosa, sensación de hormigueo o entumecimiento de las extremidades, problemas de cicatrización, entre otros, para acudir inmediatamente a un especialista, quien podrá determinar si se trata de una fase anterior a la diabetes, y si encuentra pertinente brindar un manejo con reguladores de glucosa”, afirma la Dra. Arias.
Según el estudio emitido por la Federación Internacional de Diabetes, de no tomar medidas a tiempo, hasta el 70% de las personas diagnosticadas con Prediabetes desarrollan diabetes en los años subsiguientes, una estadística que alerta sobre la importancia de identificar antecedentes que eleven la predisposición, mitigar acciones que resulten desencadenantes, incorporar hábitos de vida saludables y entender que en la detección y remisión temprana está la clave para no hacer parte de estas cifras.
Teniendo esto presente, realizar un monitoreo constante del peso y del índice de masa corporal puede resultar una herramienta útil para reconocer indicios frente a una prediabetes o diabetes. No obstante, existen otras variables a tener en cuenta, por lo que Merck presenta un test rápido que permite determinar en aproximación la predisposición que existe para desarrollar esta enfermedad.