En alianza con el SENA se inició la formación, que también apunta a la seguridad alimentaria de las familias barranquilleras.
Con el propósito de seguir consolidando el proceso de ser la primera biodiverciudad de Colombia, Barranquilla está fortaleciendo la agricultura y la silvicultura urbana.
Para avanzar en este proyecto, el Establecimiento Público Ambiental Barranquilla Verde formalizó una alianza con el SENA, específicamente con su Centro para el Desarrollo Agroecológico y Agroindustrial – CEDAGRO. En el Centro de Producción y Educación Ambiental Viverde, ubicado en el Ecoparque Jardín Botánico, se inició el programa de formación técnica certificable en Manejo de Viveros, teniendo como valor agregado un énfasis en agricultura urbana, con una formación de 1 año.
La primera promoción estará conformada por un grupo de 25 personas, entre ellas voluntarios de diferentes entidades y comunidad en general, que hacen parte de las ferias #AsíVivoMiBarrio y #BarriosImparables, y que tuvieron acceso al curso por su interés durante las jornadas de agricultura urbana realizadas por la autoridad ambiental.
El director general de Barranquilla Verde, Henry Cáceres, dijo que “la autoridad ambiental sigue consolidando su proyecto de agricultura urbana de huertas en casa, principalmente trabajando por la seguridad alimentaria de los barranquilleros, es por eso que con el SENA se lleva a cabo una alianza con el fin de capacitar ciudadanos y convertirlos en técnicos en manejo de viveros, con énfasis en agricultura urbana, con esto se sigue fortaleciendo el trabajo y dando herramientas a los ciudadanos para que se puedan alimentar mejor y asimismo puedan convertir estos conocimientos en una opción de trabajo”.
Durante las jornadas de formación que se han venido desarrollando cada semana, los nuevos aprendices ya han experimentado actividades prácticas como la taxonomía de las plantas, tratamiento y preparación de tierra abonada, podas técnicas y mantenimiento, tipos de reproducciones para especies ornamentales y próximamente iniciarán labores de germinación de especies de hortalizas a partir de la apropiación de espacios dentro del invernadero ubicado en el Jardín Botánico.
Diana Esparragosa, aprendiz de esta alianza, manifestó que esta capacitación le va a permitir tener una vida productiva en su hogar. “Soy aprendiz como técnico de Viverde en el SENA y aquí he aprendido con el equipo de instructores que nos enseñan cómo manejar la tierra, cómo sembrar y cómo tener una vida productiva en nuestros hogares, y luego poder hacerlo a nivel comercial, agradezco a Barranquilla Verde por su dotación en Viverde, que nos ha permitido recibir unas clases muy beneficiosas para nosotros”.
Por su parte, Roberto Brun Rocha, ingeniero agrónomo e instructor, afirmó que “desde el SENA se tiene la esperanza de que con este curso las personas puedan capacitarse y ser certificadas para que puedan buscar una fuente de trabajo adicional a lo que hacen en su vida cotidiana, esperamos que sean más las personas certificadas en el Distrito”.
Viverde es un espacio para todo público, que dispone de 21 talleres prácticos para niños y adultos. Toda persona que visite el Centro de Producción y Educación Ambiental recibe una de las 42 especies de plantas que allí se cultivan, entre las que se encuentran: el ají más pequeño del mundo, uno de los tomates más pequeños del mundo, pimentón, anís, entre otros.
Desde el año 2018 a la fecha, ha beneficiado a más de 19.200 personas con recorridos guiados, talleres de siembra, capacitaciones teóricas y prácticas, celebraciones de fechas ambientales, donación de semilleros de hortalizas y/o aromáticas, entrega de kits de huertos caseros a familias, intervenciones con montaje de huertos en el Centro de Rehabilitación Femenino, en el Hogar de Paso para ex habitantes de calle y próximamente en instituciones educativas públicas y privadas, con el propósito de fortalecer esta estrategia que le apuesta a la seguridad alimentaria y conservación del entorno desde todas las edades.
Gracias a la oferta de esta formación técnica, Viverde se convierte en un centro de educación formal y visiona que las personas encuentren en la agricultura urbana posibilidades laborales a las que puedan dedicarse a futuro.
