Alberto Agámez
Si cada día al levantarte, preguntas que, ¿hasta cuándo va a demorar este, “confinamiento obligatorio?”. La cuarentena que te tienen aburrido y preocupado porque un amigo cercano o un familiar resulte infectado con, Covid-19; pero si es un vecino el que resultare con la enfermedad, será una tragedia. Has hecho caso omiso a las autoridades porque te fastidian los protocolos, pero promueves recoger firmas en el vecindario, no para llamar a las autoridades sanitarias, sino para que la policía venga a desterrar a esa familia donde hay un médico vinculado a un centro hospitalario y te imaginas que está poniendo en peligro a los tuyos; si procedes así, es mejor que te revises, porque no has percibido que este virus, no distingue a cuál humano atacar. Respeta un poco, a aquellos que cumplen con las recomendaciones que dan los profesionales de la salud; pero cuando esto pase, lo más seguro es que por tu forma de pensar, seguirás sin darte cuenta, que eres una mala persona.
Antes de estar haciendo juicios sin fundamento, dedicado a prestar atención a todo tipo de fake news, es recomendable que cuando esto pase, tengas algún proyecto de vida para el poscoronavirus, ya que esto no termina pronto y cuando acabe, seguro el mundo será diferente y tendrás que mirarlo de otro modo. Ojalá, hayas terminado de leer un nuevo libro, hayas aprendido a resolver inconvenientes caseros por tus propios medios, sin tener que pedir ayuda, que le hayas dedicado espacio para mejorar tu empresa o modelo de negocios, pero, sobre todo, hayas aprendido a convivir con los tuyos. Que esta cuarentena te deje enseñanzas, así como dejaron las guerras a pueblos devastados que se levantaron ayudados por el esfuerzo de todos sus habitantes. No pretendo regañar, ni más faltaba, no soy el más hacendoso. Es un concejo para todos, donde me incluyo. Es lo que creo y esta mañana recordé como se aprovechaba el tiempo cuando las niñas se dedicaba a bordar, también a otras cosas en el hogar. El mundo ha cambiado, ahora se va a gran velocidad, entonces con las herramientas de hoy, aprovechemos cada segundo, para no tener que decir que mientras estábamos en nuestras labores antes del Covid-19, no ayudábamos en el hogar por falta de tiempo y que, si lo hubiéramos tenido, con seguridad adelantaríamos proyectos importantes. Ahí está, tenemos todo el tiempo, entonces desarrollemos lo que habíamos pensado antes, para no estar desorientados después del Coronavirus.
