Bangkok, 31 jul (Sputnik).- El director del Departamento de Aviación Civil de Malasia, Azharuddin Abdul Rahman, renunció a su cargo este martes tras la publicación del informe sobre la desaparición del vuelo MH370 con 239 personas a bordo el 8 de marzo de 2014.
Según el diario The Star, la salida del alto funcionario se hará efectiva dentro de dos semanas y está relacionada con el informe de 1.500 páginas que la comisión investigadora presentó este lunes.
«Pese a que la comisión no responsabiliza al Departamento de Aviación Civil de la desaparición del vuelo MH370, el informe contiene una serie de conclusiones obvias relacionadas con el trabajo de los controladores aéreos del aeropuerto de Kuala Lumpur», dijo Rahman a la prensa al anunciar su decisión.
En concreto, señaló el director, se habla del incumplimiento de los ciertos protocolos de control del tráfico aéreo.
Agregó que en los últimos cuatro años hizo todo lo posible para hallar el desaparecido avión Boeing de Malaysia Airlines y sigue comprometido con la búsqueda de respuestas sobre las causas de lo ocurrido.
La comisión no logró descifrar el enigma que envuelve al suceso pero criticó el trabajo de los controladores aéreos de Vietnam y Malasia que, según el organismo, cometieron una serie de errores.
En el informe tampoco se descarta la implicación de terceros en la desaparición de la aeronave que había salido de Kuala Lumpur y se dirigía a Pekín.
Según los investigadores, el Boeing cambió de rumbo de forma manual hacia el océano Índico antes de desaparecer de los radares.
El Boeing 777-200 de Malaysia Airlines desapareció de los radares el 8 de marzo de 2014 con 239 personas a bordo, la mayoría de ellos ciudadanos chinos.
El aparato de fabricación estadounidense se estrelló supuestamente en la zona sur del océano Índico.
En enero de 2017 Australia, Malasia y China acordaron suspender la búsqueda y en agosto los expertos australianos sugirieron una nueva zona de rastreo de 25.000 kilómetros cuadrados, donde podrían estar los fragmentos de la aeronave.
Más tarde, Kuala Lumpur autorizó a empresas privadas y particulares seguir buscando los restos de la aeronave.
La empresa Ocean Infinity, especializada en la exploración del fondo marino, se había ofrecido en agosto de 2017 para realizar la operación de búsqueda, evaluada en 200 millones de dólares, sin cobrar por sus servicios a menos que hubiera un resultado.
El 29 de mayo pasado Ocean Infinity anunció que finalizó sin éxito la operación, y al día siguiente el nuevo primer ministro malasio, Mahathir bin Mohamad, dijo que no descartaba la posibilidad de reanudar la búsqueda del avión. (Sputnik)
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